Moceop celebra sus 40 años de existencia

BREVE CRÓNICA DEL ENCUENTRO...

Moceop celebra sus 40 años de andadura eclesial

"Un sueño dinamizador, desde la terca esperanza".

(Jose Luis Sainz, 14 de Noviembre de 2017)

“Todo pasa y todo queda,
Pero lo nuestro es pasar,
Pasar haciendo caminos...”


LA ACOGIDA...

Íbamos llegando al amplio Hall del lugar de nuestra cita para celebrar y “cantar los 40” años de nuestro Movimiento. Como siempre, los abrazos de bienvenida van caldeando el ambiente. Muchos peinamos canas ya hace tiempo. Otros nos hablan de sus nietos, de sus “goteras” durante el camino de la vida de estos últimos meses o años,… pero, también como siempre en los encuentros de MOCEOP, enseguida flota en el ambiente la alegría de saber unos de otros, de vernos y de compartir algo que, sin duda, debemos al Espíritu de Jesús de Nazaret, que un día nos llamó y en el fondo es quien nos convoca hoy también. Y por aquí anda



LA REVISTA "TIEMPO DE HABLAR"...

Enseguida, el grupo de la Revista “Tiempo de Hablar”, aprovechando el Encuentro de los 40 años, se reúne un rato para dejar listos los números de la Revista del próximo año 2018. Se acuerda que uno de los números saldrá doble (casi un libro) con motivo de los 40 años de Historia del Movimiento, y los otros dos se centrarán en las Sociedades de Acogida, y en la Mujer (tratando el tema desde una Teología feminista).

Y sin más historias, tenemos el almuerzo en el que brindamos por nosotros y por aquellos a quienes representamos, moceoperos/as y compañeros, casados o no, presentes o repartidos por doquier, que hemos participado estos 40 años de atrás en la aventura del MOCEOP, nuestro Movimiento, ¡¡SALUDOS PARA TODOS!! Todos sabemos que hemos quedado aquí para celebrar una fiesta, porque nos sentimos muy agradecidos al Padre de Jesús, nuestro hermano.

LA TARDE DEL SÁBADO...

“Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria,
de los hombres mi canción.
Yo amo los mundos sutiles...”

Saludo de Tere, que nos anima a considerar este encuentro como una ocasión única para agradecer a Dios, que esta Comunidad del MOCEOP ha sentidos su presencia y sus caricias durante estos 40 años de andadura para soportar y superar retos personales, de pareja y de Comunidades con quienes hemos vivido y celebrado nuestra fe y nuestra vida de creyentes en Jesús. Comenta también los saludos llegados de otros compañeros/as de MOCEOP desde lejos, de nuestros amigos portugueses y otros compañeros “en ejercicio” que están unidos a nuestro Movimiento, etc,…

Escuchamos un breve resumen de la Historia de MOCEOP, desde que aquel otoño de 1977 en Moratalaz (Madrid), un Cura del barrio y su pareja deciden casarse y ello provoca diferentes posturas e interés entre los seglares (si él puede seguir o no ejerciendo en la Parroquia), y una profunda reflexión entre los curas del entorno por el aumento de las secularizaciones que lleva a pensar y después a proponer que el Celibato pueda ser Opcional y que este es un tema que concierne a toda la Comunidad.

En sucesivas reuniones se van tomando iniciativas para implicar a otros Movimientos y Comunidades Cristianas, Jerarquía, medios de comunicación, etc,.. en algo que concierne a todos y llega , con el tiempo, a afectar a decenas de miles de curas (y mujeres) en la Iglesia.

El nacimiento de nuestro mejor vehículo como Movimiento, la Revista “Tiempo de Hablar” que luego llegará a los 5 Continentes, hasta hoy. Lo conseguido y vivido hasta hoy queremos celebrarlo agradecidos y convencidos de hacer un buen servicio a otra Iglesia posible.

Nuestra Historia unida a la Línea del Tiempo. Aunque nuestro Movimiento nace a finales del 77, somos fruto de un contexto de acontecimientos históricos: somos gente “tocada” por el Concilio Vat. II. Aquel “abrir las ventanas..” de Juan XXIII y el tiempo de Pablo VI influenció de lleno en aquellas generaciones de Curas y laicos que pensaban en reformas serias para una Iglesia necesitada de oxígeno evangélico. Si además añadimos el contexto sociopolítico de nuestro país (final reciente de la dictadura e inicio de la transición democrática), ambas cosas hacen implicarnos en un servicio serio a una Iglesia necesitada de reformas y a una sociedad a la que esa nueva Iglesia debía servir. Y así vivir acompañando acontecimientos hasta hoy. El MOCEOP mezclado y empeñado en acompañar a la Historia con nuestro estilo de vida cristiana

La última parte de la tarde del sábado la dedicamos a rememorar “Historias de amores prohibidos”, contadas por sus protagonistas. Los sentimientos afloran a flor de piel. Al finalizar el repaso de las distintas experiencias vividas nos quedamos con la sensación de que las decisiones tomadas y lo vivido durante estos 40 años, a pesar de los sufrimientos, incomprensiones y descalificaciones que muchos han tenido que soportar, han merecido la pena…


LA FIESTA DE LA NOCHE...

“Hace algún tiempo en ese lugar,
donde los bosques se visten de espinos,
se oyó la voz de un poeta gritar,
caminante no hay camino,
se hace camino al andar.
Golpe a golpe, verso a verso...”

Ha sido una buena y entrañable fiesta. Hemos compartido frutos de nuestras diferentes tierras de procedencia. Hemos cantado, recitado, reído y brindado de nuevo por nosotros y aquellos/as a quienes queremos y a quienes echamos de menos.

LA EUCARISTÍA DEL DOMINGO...

“Caminante son tus huellas,
el camino y nada más.
Caminante, no hay camino,
Se hace camino al andar...”

El centro de nuestro encuentro fue la Eucaristía, la Pascua, el paso del Señor por nuestras vidas. Los hijos pequeños y grandes de los que allí estábamos, con sus representaciones y de la mano del Exodo 3,1-2 y 7-10 nos llevaron hasta aquellos cuidados del Señor por su Pueblo oprimido, saliendo de Egipto y cruzando el desierto.

Gracias Señor, por tantos detalles de cuidado y ternura. Tu hijo Jesús está con nosotros, y con él hemos sentido tu presencia durante estos 40 años de andadura. Hemos vivido de todo: desierto, resistencia, dudas, esperanza,…Tu maná diario nos ha fortalecido para superar retos y riesgos; para vivir el amor de la pareja, la paternidad, la amistad y la vida en Comunidades adultas. Gracias Señor por la mujer amiga y compañera de viaje, tan necesaria para andar con quien te da y enseña tanto. Gracias por tenerla al lado y disfrutar, reir y llorar, juntos hasta que tú quieras.


Hemos podido vivir nuestros compromisos laborales y de servicio a los demás. Nos hemos sentido más humanos en tu cobijo y hemos descubierto y amado a nuestra madre tierra. Gracias mil, gracias Señor por tanto cuidado con nosotros, nuestros hijos, nietos y amigos. Protege, te pedimos, a tantos que hoy caminan fuera de sus hogares y países. Déjanos, te pedimos, gozar de esa “tierra prometida” donde mana la leche y miel de tu paz, justicia, amor y solidaridad.

LA FOTO DE TODOS Y EL "HASTA LUEGO"...

“Golpe a golpe, verso a verso,
Golpe a golpe, verso a verso.
Golpe a golpe, verso a VERSO.”

Porque así terminamos todos al darnos el abrazo de despedida…..
!SEGUIMOS¡... !Qué fuerte!....